Cap. 21 Protegiéndote silenciosamente.

Autora: Chai Jidan.
Traductores al inglés: anhnguyen12332, DungQuoc16, Hoaoilinh, HiuPhm277, trangcugia.
Traducción al español : Jossy Rdz.

"Entre esos criminales, uno se ha escapado."

Yuan Zong permaneció pensativo durante un rato, luego dijo: "Lo sé".

Al volver al campo de entrenamiento, el vice-instructor fue testigo del cambio en la expresión facial de su rostro, "¿Qué pasa?"

"Algunos problemas han salido en Beijing."

"Si es urgente, entonces sigue adelante, tú todavía tienes que administrar este lugar. De hecho, no es necesario que tu le enseñes directamente a cada alumno. Nuestro método de entrenamiento es bastante igual, ¿no confías en nuestra capacidad de liderazgo? "

En realidad, el problema no era si Yuan Zong confiaba o no, sino de puntos de vista y principios. Muchos adultos jóvenes entraron en este instituto sólo por la reputación de Yuan Zong. Su fama en este círculo instó a estos guardaespaldas a dejar sus vidas de lujo, experimentando rigurosos cursos de formación para convertirse en su estudiante.

Yuan Zong fríamente dijo, "¡Continuar entrenando!"

***

Xia Yao también había oído la noticia de un criminal fugitivo. Resultó que ese día no sólo había siete criminales, sino que otro criminal se había escondido en el autobús. Cuando los policías se enfrentaron a la lucha, este hombre aprovechó su falta de vigilancia y desapareció en la oscuridad.

Fue sólo cuando se transmitió la noticia que los ciudadanos se sintieron agitados.

Incluso la policía estaba también ansiosa. Después de todo, éstos eran terroristas que fueron asesinados en un día. Además, la situación en ese momento estaba en tal desorden que nadie sabía de quién era el tiro. Una vez que este criminal regrese para vengarse, las familias de muchos policías están en peligro

La luz del día era más segura, incluso los cerebros de los criminales no son lo suficientemente estúpidos como para entrar en una trampa. Pero cuando cae la noche, el peligro se oculta desde el camino del trabajo ala casa, alrededor de su residente, o incluso en cada rincón de su casa

Estas amenazas pueden aplicarse especialmente a Xia Yao, quien actuó como el más valiente durante esa pelea. La fuerza quería darle con el coche especializado, pero por el contrario se negó a nada.

Si tienes suficiente valor, entonces por todos los medios, ¡muéstrate! Papá ha estado esperando tu apariencia todo este tiempo.

***

Al atardecer, después del curso de formación, Yuan Zong condujo de Yentai, aproximadamente cinco horas, hasta llegar a Beijing. Era medianoche, casi todo el mundo había dormido profundamente. Xia Yao también lo estaba.

Yuan Zong encendió un cigarrillo, disfrutándolo solo fuera de la ventana del dormitorio de Xia Yao. Su expresión facial no mostraba nada aparte de la calma, sin embargo, su mente estaba en alerta, siempre vigilando lo que se esconde en las sombras.

No fue hasta el amanecer que Yuan Zong regresó a Yentai, continuando con el trabajo de entrenamiento del día siguiente.

*******

Durante los dos últimos días, la colina myna fue mucho más franca, además tampoco lloró más durante la noche. Cuando Xia Yao se despertó para ir al baño, echó una ojeada a la myna para asegurarse de que algo estuviera mal o no, pero ... resultó que la myna había desaparecido.

Luego, viendo la ventana, Xia Yao quedó completamente sorprendido.

Yuan Zong tenía la espalda girada hacia la ventana; La magnífica y firme espalda permanecía inmóvil, y sus manos sostenían firmemente las mangas. Xia Yao había escuchado hace mucho tiempo que si dos manos sostienen las mangas significa que es para evitar el sudor pueda interferir con disparar armas o recargar balas.

Xia Yao también vio que el cuello de Yuan Zong y detrás de las orejas tenía tantas picadura de mosquito que había descifrado, pero ni siquiera se molestó en rascar las marcas. Sólo se quedó allí. Este lugar tenía un montón de mosquitos, todo porque Xia Yao había lanzado lejos una sopa de pescado aquí ayer. El olor era tan desagradable que esos insectos literalmente rodeaban los alrededores.

En este momento, desde el fondo del corazón de Xia Yao había una especie de emoción indescriptible.

Quería romper la ventana para decirle a Yuan Zong, "No necesito tu ayuda, no quiero deberte ...", pero no pudo.

Xia Yao regresó al dormitorio, respiró profundamente y se arrastró hasta su cálida cama.

Una noche de insomnio, no fue hasta el amanecer que sólo hubo la más leve conmoción en la ventana.

Xia Yao echó un vistazo al balcón, la colina myna estaba de vuelta