Cap. 94 Una Esposa Capaz.
Xia Yao nunca esperó que su campaña de mercadotecnia para la compañía durante estas vacaciones le diera tal reputación.
En los últimos días, la línea directa de la compañía ha estado bajo constante amenaza de sobrecarga. Los flujos de reporteros e invitados que pasaban por la puerta principal parecían interminables. Varios capacitadores y miembros del personal pronto se turnaron para regresar a la compañía antes de que terminaran las vacaciones, a fin de mantener su lugar de trabajo seguro y bajo control.
No es de extrañar que una reputación sobresaliente tarde o temprano resulte en celos de otros competidores en la misma ocupación. Como la gente estaba prestando más atención a la empresa, la información falsa con el objetivo de dañarla se estaba propagando a través de Internet a un ritmo horrendo. Afortunadamente, estos fueron rumores no confirmados, no lo suficiente como para tener efectos notables en la imagen general de la compañía. Habiendo dicho eso, todavía había numerosas amenazas que seguían molestando a Xia Yao.
Cuando Yuan Zong acababa de irse, y con Xia Yao familiarizado con el consejo de administración de la compañía, ahora estaba a cargo de todas las responsabilidades, desde asuntos importantes como mantener algunas relaciones y promocionar en línea hasta cosas pequeñas como cuidar de los maceteros en el bosque vigilando su proceso de floración. Parecía que completar estos dos tipos diferentes de tareas debe ser de dos personas diferentes.
Además, fue Xia Yao quien tomó las decisiones. Independientemente de las posiciones, todos tenían que pedir su permiso cuando tenían la necesidad de encontrar a Yuan Zong para resolver sus problemas.
En esta compañía, Xiao Yao no era en absoluto un gato gordo, pero todos los gerentes estaban más que dispuestos a obedecerlo.
Dijeron: "Ahora eres como una familia, así que todo depende de ti para decidir. Al final del día, eres el cuñado de la casa Yuan".
"¡Lo que sea que diga, mientras escuche mis órdenes, puede llamarme hijo de ese tipo!"
A principios de marzo, como Xia Yao sentía que todo su personal estaba ocupado en su trabajo, incluso durante las vacaciones, les regaló una fiesta de dos días en un onsen ( fuente termal ). Mientras tanto, trajo dos loros a la compañía para dar un paseo fuera.
Apenas había despejado una rama que se encontraba en su camino cuando sonó el teléfono en su bolsillo. Echando un vistazo al nombre de Xuan Da Yu, Xia Yao sintió inmediatamente la familiar frustración. Desde el día en que volvió de la casa de Wang Zhi Shui, Xuan Da Yu siguió actuando como un psicópata, llamando a Xia Yao incluso cuando no había nada que valiera la pena decirle. El número de llamadas puede variar de tres a treinta y cuatro por día. "Déjame decirte esto, porque lo de Wang Zhi Shui ha terminado, ya no sientes la necesidad de perseguirlo, por lo tanto, ¿no podrías pensar en qué mejor que hacer sino en ser mi cola?"
"De alguna manera eso es verdad". Xuan Da Yu se rió entre dientes. "¿Que estas haciendo ahora?"
Xia Yao pateó una piedra en un lado de la carretera, "Trabajando para la compañía de guardaespaldas".
"¿Otra vez? ¿Por qué sigues visitando ese lugar? Tienes una participación en él, ¿cierto?"
"No, solo porque hoy el personal está ocupado con algunos asuntos, así que me quedé atrás para ayudar a administrar el trabajo".
"¿Quién te dice que ayudes?"
Xia Yao mintió, "¡Dios mío! Wang Zhi Shui apareció justo en la puerta de tu casa".
Con su instinto habitual, Xuan Da Yu volvió sus ojos a la ventana.
Xia Yao se rió antes de colgar.
El teléfono sonó de nuevo después de un tiempo. Xia Yao no contestó, metiendo su teléfono más profundamente en el bolsillo, hasta que solo pudo escuchar a un loro murmurar palabras rotas que combinaban con el tono de llamada. El teléfono no dejó de sonar, e incluso sonó justo después de que se detuvo, como si la persona al otro lado de la línea estuviera en una emergencia.
Xia Yao juró en voz baja: Xuan Da Yu, ¿no sabes que me estás volviendo loco ? Pero cuando abrió su teléfono, todas las llamadas no fueron de Xuan Da Yu sino de su personal, que se suponía que estaban disfrutando de sus vacaciones.
Con la ansiedad arremolinándose en su estómago, Xia Yao rápidamente deslizó el botón de respuesta para recibir la próxima llamada.
"¿Es ese Xia Yao? ¡Date prisa, ven a nuestro lugar, esto no es bueno en absoluto!"
Cuando Xia Yao llegó al sitio, todo estaba en un caos total. Treinta y cuatro personas se atacaban entre sí, la mayoría de los cuales eran guardaespaldas de la compañía, luchando contra algunos tipos agresivos desconocidos. También estaba el guardia del complejo que se atrevió a quedarse a un lado, tratando de detener a las pandillas con sus palabras ...
"¿Qué ha pasado?" Xia Yao preguntó apresuradamente a Shi Tian Biao.
El hombre respondió, sus ojos enrojecidos de ira, "Solo estábamos tomando un baño caliente cuando una pandilla irrumpió y ladró historias sin sentido, tratando de avergonzarnos. Al principio, al pensar en la imagen de la compañía, elegimos algunas palabras para hacerlos salir de allí, pero no solo terminaron gritándonos, sino que también usaron la violencia. Verá, todos somos hombres decentes, ¿cómo puede alguien tolerar esto? "
Xia Yao miró a la pandilla con ojos de acero y preguntó: "¿Conocen a estos tipos?"
"Solo uno."
"¿Cúal?"
Shi Tian Biao señaló a un hombre, "Se llama Wang Chian, un guardaespaldas de la compañía Hei Bao [1] , apodado Heizi [2] ".
([1]: Pantera negra. [2]: Hei en ambas palabras significa Negro, Oscuro)
Hei Bao también era una compañía de guardaespaldas y asesora de seguridad, que durante mucho tiempo había sido rival de la compañía de Yuan Zong. Esta empresa entró en el negocio bastante temprano y se ha hecho un nombre, atrayendo todo tipo de crema de la cosecha. Dicho eso, después de dos años perdiendo contra la compañía de Yuan Zong, su personal pronto tuvo un profundo resentimiento que anhelaba ser liberado como lo que estaba pasando en esta batalla inesperada. En realidad, Shi Tian Biao entendió todas estas cosas, y viendo que su compañía se encontraba actualmente en una situación difícil, los que más sufrieron deben ser él y sus colegas, ya sea que puedan ganar o no.
Sin embargo, tenía razón, ¿quién en la tierra podría soportar las acciones violentas sin sentido de estos rivales?
Como Xia Yao todavía estaba sumido en sus pensamientos, una botella de vino voló en su dirección antes de romperse en mil pedazos a su lado.
Shi Tian Biao rugió, "¡Que te jodan, hijo de puta!" arremetiendo contra la banda como un animal salvaje enfurecido.
Xia Yao se dio cuenta de que la otra pandilla solo luchaba con su equipo pero no podía devolverles los golpes, y todos esos hombres parecían una especie de gánsteres callejeros sin educación. En otras palabras, había pocos guardaespaldas reales aquí, mientras que los demás fueron elegidos indiscriminadamente y se agregaron al equipo. Sabiendo bien su inferioridad, estos tipos eligieron provocar regularmente a los colegas de Xiao Yao, y más de la mitad de ellos fueron duramente golpeados por los hombres de su lado.
"¡Rápido, toma una foto!"
Al escuchar el grito, Xia Yao giró en su dirección, su corazón latía violentamente. De hecho, había varios periodistas con cámaras en la puerta, e incluso parecían haber estado allí durante bastante tiempo para registrar el caos.
Los guardaespaldas de la compañía de Yuan Zong pronto se asustaron. No había ninguna duda de que se trataba de otro esquema de la prensa en colaboración con Hei Bao, utilizando trucos sucios para deteriorarlos.
Xia Yao dudó, demasiado nerviosa para recurrir a la violencia en una situación así, mientras que los insultos de sus enemigos no tenían señales de detenerse pronto.
"¿Qué debemos hacer ahora?" Shi Tian Biao le preguntó a Xia Yao: "¿Necesitamos llamar al jefe Yuan?"
"No". Xia Yao se mantuvo perfectamente calmada. "Seguir luchando."
Su orden confundió a Shi Tian Biao. "Sigue luchando"
Estos reporteros nos han tomado fotos, continuar peleando significa verlos como invisibles. Si publican esta noticia, seremos inmediatamente ... "
Frente a más de treinta hombres, nunca antes Xia Yao había sentido una energía tan vigorosa.
Él gritó: "¡Pon toda tu fuerza! ¡Me las arreglaré con el resultado que sea!"
Justo después de su declaración, ¡la tolerancia de todos los colegas se hizo añicos! El ruido sordo de los golpes mortales contra la carne, el ruido metálico de las armas se podía escuchar hasta la entrada principal, junto con el olor a sangre arrastrada. Esto sin duda estimuló aún más el hambre de los periodistas, ya que levantaron las cámaras de nuevo al ver la "cooperación impecable" del personal de Yuan Zong, cuando se suponía que se habían ido hace mucho tiempo.
Xia Yao voló hacia el tipo llamado Heizi como un tigre loco, golpeándolo directamente en su frente, golpeando indirectamente dos dientes delanteros. Con otro tornado de patadas mortales, Xia Yao aterrizó su par de piernas en el pecho de Heizi. El robusto cuerpo se elevó en el aire en la órbita prevista, y continuó moviéndose durante otros diez metros antes de detenerse en el objetivo de la cámara. Heizi parecía estar satisfecho con este acto de ser víctima de los ojos de la prensa, lo que serviría como una prueba de la brutalidad del personal de Yuan Zong.
Solo cuando Heizi no pudo moverse ni una pulgada del suelo, y estaba tumbado boca abajo con sus pestañas moviéndose ligeramente de una manera astuta, Xia Xia se detuvo.
Finalmente, todo había sido controlado. Cuando los reporteros estaban a punto de irse, un automóvil se detuvo frente a ellos.
La ventana se deslizó hacia abajo, como una cabeza apareció detrás de él con curiosidad.
"¡¿Quieres ir a un lugar a tomar algo ?!"
A primera vista, los periodistas reconocieron que el extraño era un organizador de propagandas televisivas, con quienes se habían juntado varias veces. Así que no perdieron el tiempo para subirse al automóvil en busca de un pub[3]
[3]Un pub (abreviación de public house, que en español significa "casa pública") es un establecimiento donde se sirven bebidas alcohólicas, no alcohólicas, y refrigerios, bajo las premisas del país correspondiente.
Media hora más tarde, Xia Yao logró alcanzarlos.
Al darse cuenta de su perseguidor, las caras de los periodistas se pusieron pálidas. Temían que Xia Yao supiera que solo eran títeres de un poder mayor.
Inesperadamente, Xia Yao les sonrió y dijo: "Tengo un agradecimiento especial paraustedes".
Los periodistas se miraron, sintiendo un escalofrío en la espalda.
"Hoy, nuestra compañía y Hei Bao tuvieron un combate cuerpo a cuerpo en el balneario de aguas termales, solo para divertirse un poco y, por supuesto, nadie quería que los reporteros hicieran un escándalo. No esperábamos que fueran tan útiles que incluso grabaron todas las rondas. Una vez que se publiquen estos videos, ¿no se iluminarán los espíritus de los guardaespaldas? "
Ningún reportero se atrevió a abrir la boca.
"Oh, ¿no sabes que solo estábamos peleando por diversión? Y también, ¿puedes dejarme ver esas fotos?"
El líder del escuadrón de fotógrafos no pudo hacer nada más que entregarle a Xia Yao su cámara.
Al encontrar una foto de buena calidad que describía su pelea con Heizi, Xia Yao dijo a los reporteros: "Es un destacado personal de Hei Bao, que ha recibido varios premios de prestigio. En mi compañía, suelo moler frijoles de soya (es decir, juega y no es serio) , nunca esperé haberlo derrotado en un abrir y cerrar de ojos. Al editar esto, por favor haz que mi cara luzca más guapa ".
Escogiendo otra foto, Xiao lo miró cuidadosamente y alabó: "¡Elegiste una esquina tan perfecta para la lente! Ojos poderosos, aura formidable de un luchador, esto ciertamente no está nada mal".
Los reporteros finalmente abandonaron el pub con expresión de miedo en sus rostros pálidos.
De vuelta a su casa esa noche, Xia Yao estaba totalmente acabado, con las dos manos hinchadas por golpear implacablemente durante el día. Cuando Yuan Zong lo llamó, solo logró mantener el teléfono sobre sus rodillas, apoyándose en la pantalla para hablar.
"Tan cansado." Él murmuró.
"¿Porque?" preguntó Yuan Zong.
"Salí a jugar todo el día".
"Entonces ve a la cama temprano."
Xia Yao tarareó de acuerdo, y se quedó dormida con su cabeza en el teléfono, con las respiraciones constantes de Yuan Zong como una canción de cuna.
En los últimos días, la línea directa de la compañía ha estado bajo constante amenaza de sobrecarga. Los flujos de reporteros e invitados que pasaban por la puerta principal parecían interminables. Varios capacitadores y miembros del personal pronto se turnaron para regresar a la compañía antes de que terminaran las vacaciones, a fin de mantener su lugar de trabajo seguro y bajo control.
No es de extrañar que una reputación sobresaliente tarde o temprano resulte en celos de otros competidores en la misma ocupación. Como la gente estaba prestando más atención a la empresa, la información falsa con el objetivo de dañarla se estaba propagando a través de Internet a un ritmo horrendo. Afortunadamente, estos fueron rumores no confirmados, no lo suficiente como para tener efectos notables en la imagen general de la compañía. Habiendo dicho eso, todavía había numerosas amenazas que seguían molestando a Xia Yao.
Cuando Yuan Zong acababa de irse, y con Xia Yao familiarizado con el consejo de administración de la compañía, ahora estaba a cargo de todas las responsabilidades, desde asuntos importantes como mantener algunas relaciones y promocionar en línea hasta cosas pequeñas como cuidar de los maceteros en el bosque vigilando su proceso de floración. Parecía que completar estos dos tipos diferentes de tareas debe ser de dos personas diferentes.
Además, fue Xia Yao quien tomó las decisiones. Independientemente de las posiciones, todos tenían que pedir su permiso cuando tenían la necesidad de encontrar a Yuan Zong para resolver sus problemas.
En esta compañía, Xiao Yao no era en absoluto un gato gordo, pero todos los gerentes estaban más que dispuestos a obedecerlo.
Dijeron: "Ahora eres como una familia, así que todo depende de ti para decidir. Al final del día, eres el cuñado de la casa Yuan".
"¡Lo que sea que diga, mientras escuche mis órdenes, puede llamarme hijo de ese tipo!"
A principios de marzo, como Xia Yao sentía que todo su personal estaba ocupado en su trabajo, incluso durante las vacaciones, les regaló una fiesta de dos días en un onsen ( fuente termal ). Mientras tanto, trajo dos loros a la compañía para dar un paseo fuera.
Apenas había despejado una rama que se encontraba en su camino cuando sonó el teléfono en su bolsillo. Echando un vistazo al nombre de Xuan Da Yu, Xia Yao sintió inmediatamente la familiar frustración. Desde el día en que volvió de la casa de Wang Zhi Shui, Xuan Da Yu siguió actuando como un psicópata, llamando a Xia Yao incluso cuando no había nada que valiera la pena decirle. El número de llamadas puede variar de tres a treinta y cuatro por día. "Déjame decirte esto, porque lo de Wang Zhi Shui ha terminado, ya no sientes la necesidad de perseguirlo, por lo tanto, ¿no podrías pensar en qué mejor que hacer sino en ser mi cola?"
"De alguna manera eso es verdad". Xuan Da Yu se rió entre dientes. "¿Que estas haciendo ahora?"
Xia Yao pateó una piedra en un lado de la carretera, "Trabajando para la compañía de guardaespaldas".
"¿Otra vez? ¿Por qué sigues visitando ese lugar? Tienes una participación en él, ¿cierto?"
"No, solo porque hoy el personal está ocupado con algunos asuntos, así que me quedé atrás para ayudar a administrar el trabajo".
"¿Quién te dice que ayudes?"
Xia Yao mintió, "¡Dios mío! Wang Zhi Shui apareció justo en la puerta de tu casa".
Con su instinto habitual, Xuan Da Yu volvió sus ojos a la ventana.
Xia Yao se rió antes de colgar.
El teléfono sonó de nuevo después de un tiempo. Xia Yao no contestó, metiendo su teléfono más profundamente en el bolsillo, hasta que solo pudo escuchar a un loro murmurar palabras rotas que combinaban con el tono de llamada. El teléfono no dejó de sonar, e incluso sonó justo después de que se detuvo, como si la persona al otro lado de la línea estuviera en una emergencia.
Xia Yao juró en voz baja: Xuan Da Yu, ¿no sabes que me estás volviendo loco ? Pero cuando abrió su teléfono, todas las llamadas no fueron de Xuan Da Yu sino de su personal, que se suponía que estaban disfrutando de sus vacaciones.
Con la ansiedad arremolinándose en su estómago, Xia Yao rápidamente deslizó el botón de respuesta para recibir la próxima llamada.
"¿Es ese Xia Yao? ¡Date prisa, ven a nuestro lugar, esto no es bueno en absoluto!"
Cuando Xia Yao llegó al sitio, todo estaba en un caos total. Treinta y cuatro personas se atacaban entre sí, la mayoría de los cuales eran guardaespaldas de la compañía, luchando contra algunos tipos agresivos desconocidos. También estaba el guardia del complejo que se atrevió a quedarse a un lado, tratando de detener a las pandillas con sus palabras ...
"¿Qué ha pasado?" Xia Yao preguntó apresuradamente a Shi Tian Biao.
El hombre respondió, sus ojos enrojecidos de ira, "Solo estábamos tomando un baño caliente cuando una pandilla irrumpió y ladró historias sin sentido, tratando de avergonzarnos. Al principio, al pensar en la imagen de la compañía, elegimos algunas palabras para hacerlos salir de allí, pero no solo terminaron gritándonos, sino que también usaron la violencia. Verá, todos somos hombres decentes, ¿cómo puede alguien tolerar esto? "
Xia Yao miró a la pandilla con ojos de acero y preguntó: "¿Conocen a estos tipos?"
"Solo uno."
"¿Cúal?"
Shi Tian Biao señaló a un hombre, "Se llama Wang Chian, un guardaespaldas de la compañía Hei Bao [1] , apodado Heizi [2] ".
([1]: Pantera negra. [2]: Hei en ambas palabras significa Negro, Oscuro)
Hei Bao también era una compañía de guardaespaldas y asesora de seguridad, que durante mucho tiempo había sido rival de la compañía de Yuan Zong. Esta empresa entró en el negocio bastante temprano y se ha hecho un nombre, atrayendo todo tipo de crema de la cosecha. Dicho eso, después de dos años perdiendo contra la compañía de Yuan Zong, su personal pronto tuvo un profundo resentimiento que anhelaba ser liberado como lo que estaba pasando en esta batalla inesperada. En realidad, Shi Tian Biao entendió todas estas cosas, y viendo que su compañía se encontraba actualmente en una situación difícil, los que más sufrieron deben ser él y sus colegas, ya sea que puedan ganar o no.
Sin embargo, tenía razón, ¿quién en la tierra podría soportar las acciones violentas sin sentido de estos rivales?
Como Xia Yao todavía estaba sumido en sus pensamientos, una botella de vino voló en su dirección antes de romperse en mil pedazos a su lado.
Shi Tian Biao rugió, "¡Que te jodan, hijo de puta!" arremetiendo contra la banda como un animal salvaje enfurecido.
Xia Yao se dio cuenta de que la otra pandilla solo luchaba con su equipo pero no podía devolverles los golpes, y todos esos hombres parecían una especie de gánsteres callejeros sin educación. En otras palabras, había pocos guardaespaldas reales aquí, mientras que los demás fueron elegidos indiscriminadamente y se agregaron al equipo. Sabiendo bien su inferioridad, estos tipos eligieron provocar regularmente a los colegas de Xiao Yao, y más de la mitad de ellos fueron duramente golpeados por los hombres de su lado.
"¡Rápido, toma una foto!"
Al escuchar el grito, Xia Yao giró en su dirección, su corazón latía violentamente. De hecho, había varios periodistas con cámaras en la puerta, e incluso parecían haber estado allí durante bastante tiempo para registrar el caos.
Los guardaespaldas de la compañía de Yuan Zong pronto se asustaron. No había ninguna duda de que se trataba de otro esquema de la prensa en colaboración con Hei Bao, utilizando trucos sucios para deteriorarlos.
Xia Yao dudó, demasiado nerviosa para recurrir a la violencia en una situación así, mientras que los insultos de sus enemigos no tenían señales de detenerse pronto.
"¿Qué debemos hacer ahora?" Shi Tian Biao le preguntó a Xia Yao: "¿Necesitamos llamar al jefe Yuan?"
"No". Xia Yao se mantuvo perfectamente calmada. "Seguir luchando."
Su orden confundió a Shi Tian Biao. "Sigue luchando"
Estos reporteros nos han tomado fotos, continuar peleando significa verlos como invisibles. Si publican esta noticia, seremos inmediatamente ... "
Frente a más de treinta hombres, nunca antes Xia Yao había sentido una energía tan vigorosa.
Él gritó: "¡Pon toda tu fuerza! ¡Me las arreglaré con el resultado que sea!"
Justo después de su declaración, ¡la tolerancia de todos los colegas se hizo añicos! El ruido sordo de los golpes mortales contra la carne, el ruido metálico de las armas se podía escuchar hasta la entrada principal, junto con el olor a sangre arrastrada. Esto sin duda estimuló aún más el hambre de los periodistas, ya que levantaron las cámaras de nuevo al ver la "cooperación impecable" del personal de Yuan Zong, cuando se suponía que se habían ido hace mucho tiempo.
Xia Yao voló hacia el tipo llamado Heizi como un tigre loco, golpeándolo directamente en su frente, golpeando indirectamente dos dientes delanteros. Con otro tornado de patadas mortales, Xia Yao aterrizó su par de piernas en el pecho de Heizi. El robusto cuerpo se elevó en el aire en la órbita prevista, y continuó moviéndose durante otros diez metros antes de detenerse en el objetivo de la cámara. Heizi parecía estar satisfecho con este acto de ser víctima de los ojos de la prensa, lo que serviría como una prueba de la brutalidad del personal de Yuan Zong.
Solo cuando Heizi no pudo moverse ni una pulgada del suelo, y estaba tumbado boca abajo con sus pestañas moviéndose ligeramente de una manera astuta, Xia Xia se detuvo.
Finalmente, todo había sido controlado. Cuando los reporteros estaban a punto de irse, un automóvil se detuvo frente a ellos.
La ventana se deslizó hacia abajo, como una cabeza apareció detrás de él con curiosidad.
"¡¿Quieres ir a un lugar a tomar algo ?!"
A primera vista, los periodistas reconocieron que el extraño era un organizador de propagandas televisivas, con quienes se habían juntado varias veces. Así que no perdieron el tiempo para subirse al automóvil en busca de un pub[3]
[3]Un pub (abreviación de public house, que en español significa "casa pública") es un establecimiento donde se sirven bebidas alcohólicas, no alcohólicas, y refrigerios, bajo las premisas del país correspondiente.
Media hora más tarde, Xia Yao logró alcanzarlos.
Al darse cuenta de su perseguidor, las caras de los periodistas se pusieron pálidas. Temían que Xia Yao supiera que solo eran títeres de un poder mayor.
Inesperadamente, Xia Yao les sonrió y dijo: "Tengo un agradecimiento especial paraustedes".
Los periodistas se miraron, sintiendo un escalofrío en la espalda.
"Hoy, nuestra compañía y Hei Bao tuvieron un combate cuerpo a cuerpo en el balneario de aguas termales, solo para divertirse un poco y, por supuesto, nadie quería que los reporteros hicieran un escándalo. No esperábamos que fueran tan útiles que incluso grabaron todas las rondas. Una vez que se publiquen estos videos, ¿no se iluminarán los espíritus de los guardaespaldas? "
Ningún reportero se atrevió a abrir la boca.
"Oh, ¿no sabes que solo estábamos peleando por diversión? Y también, ¿puedes dejarme ver esas fotos?"
El líder del escuadrón de fotógrafos no pudo hacer nada más que entregarle a Xia Yao su cámara.
Al encontrar una foto de buena calidad que describía su pelea con Heizi, Xia Yao dijo a los reporteros: "Es un destacado personal de Hei Bao, que ha recibido varios premios de prestigio. En mi compañía, suelo moler frijoles de soya (es decir, juega y no es serio) , nunca esperé haberlo derrotado en un abrir y cerrar de ojos. Al editar esto, por favor haz que mi cara luzca más guapa ".
Escogiendo otra foto, Xiao lo miró cuidadosamente y alabó: "¡Elegiste una esquina tan perfecta para la lente! Ojos poderosos, aura formidable de un luchador, esto ciertamente no está nada mal".
Los reporteros finalmente abandonaron el pub con expresión de miedo en sus rostros pálidos.
De vuelta a su casa esa noche, Xia Yao estaba totalmente acabado, con las dos manos hinchadas por golpear implacablemente durante el día. Cuando Yuan Zong lo llamó, solo logró mantener el teléfono sobre sus rodillas, apoyándose en la pantalla para hablar.
"Tan cansado." Él murmuró.
"¿Porque?" preguntó Yuan Zong.
"Salí a jugar todo el día".
"Entonces ve a la cama temprano."
Xia Yao tarareó de acuerdo, y se quedó dormida con su cabeza en el teléfono, con las respiraciones constantes de Yuan Zong como una canción de cuna.
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